Mira, no… por ahí no paso.
Quienes me conocéis, sabréis que para ciertas cosas soy un poco intransigente, un ejemplo que saca a relucir mi rebeldía, sucedió hace unos días en Francia; una chica estaba tranquilamente tomando el sol en un parque, cuando un grupo de “personas” (lo que hicieron no lo hacen ni los animales salvajes) se le acercó, y tachándola de inmoral (¡quienes se creen que son, para tachar de inmorales a nadie!), le propinaron, así porque sí, unos cuantos golpes y bofetadas. La historia, para quien aún no se haya enterado, podéis encontrarla en cualquier medio de prensa de estos días.
Con esto comenzó un movimiento al que me uno, pero no con una foto… porque estos días por desgracia, no está el tiempo como para ponerse en bikini (¡con el buen tiempo que tuvimos últimamente!), sino con una imagen creada para la ocasión, y el hashtag que os invito a utilizar, cuando el tiempo vuelva a dejarnos: #jeportemonmaillotauparc
Sin más, sed justos, sed agradecidos… y la vida os lo devolverá. ¡Hasta la vista, detallistas! 😉 como siempre ¡gracias por leer! (si queréis comentar sobre el tema, por supuesto… más abajo, estoy abierta a escuchar/ leer cualquier tipo de opinión)
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